martes, 11 de junio de 2013

LOS LIBROS Cristina Rodríguez FALARDIAS

Los libros

 Autora: Cristina Rodríguez   3º ESO    Falardias


   ¿Nunca te has puesto a pensar lo importante que son los libros? La de cosas que puedes llegar a aprender con sólo leer, la de cosas que nunca hubieses llegado a imaginar, como por ejemplo que “De media, las tabletas de chocolate tienen 8 patas de insecto en ellas”. Aunque eso, es obvio que en un libro de Lengua castellana de segundo de ESO sea más difícil de aprender, sí lo puedes vivir en una novela.


   No apreciamos todo lo que los libros nos dan, mucha gente piensa que una biblioteca es un sitio para empollones, donde va la gente sin vida social, pero para mí, es un paraíso. Es un lugar magnífico, donde me podría pasar horas y horas leyendo sin parar; un lugar en el cual el silencio es más que agradable y lo único que se escucha es el sonido de la gente pasando la página, para ver qué es lo que viene en el siguiente párrafo, para ver qué sucederá con aquel ladrón que estaba atracando a aquella chica, en la quinta avenida de Nueva York.

Hay libros de estudio y libros que te transportan a un amor apasionado del verano del 43, que te tienden a tomar el sol en aquella playa de Barcelona, que te incitan a ser el policía que quiere descubrir quién ha asesinado a aquel vecino viejo y gruñón para quedarse con toda su herencia.

Si dedicáramos unas cinco horas a la semana para leer, al cabo de dos años sabríamos escribir mucho mejor, porque aunque creamos que no nos influye, no es así, porque mientras leemos, nuestra mente absorbe las palabras.

Los adolescentes de hoy deberían implicarse más en los libros, y un viernes, por ejemplo, en vez de ir a dar una vuelta con los amigos, podrían disfrutar de una tarde de aventuras ¡en la biblioteca! Estoy segura de que si lo probaran, más de uno repetiría.

El secreto del niño de Bankok Alba Merino 1º ESO Relatos Girardias

Autora: Alba Merino 1º ESO               Parte I


El secreto del niño de Bankok.


     En los tiempos aquéllos en los que los legítimos guerreros luchaban para ver cuál de ellos era el más fuerte de todos, en esos tiempos en los que Japón o China estaba en guerra por la más ridícula tontería, sucedió lo que os cuento en esta breve historia. ¿Queréis conocerla? Pues, adelante...

Capítulo I: El comienzo.

1971. China, 17 de diciembre, martes.

     En este día se inició la primera guerra de China contra el Tíbet. Los tibetanos se alzaron con la victoria. Hubo, en esa guerra, más de 100.000 muertos y unos 16.000 heridos graves y 4 ilesos. Entre los muertos, mi padre y mi tía. ¡Ah! Por cierto, me llamo Kaito Chiethath. Y ésta es mi historia: tengo 19 años, mi familia es de Tailandia, en Bankok. Bueno, la mayoría. Mis abuelos viven cerca, en el pueblo de Tianjui, un pueblo pequeñísimo pero que para la gente que vive por allí es más grande que Bankok.

Mi sueño es ir a estudiar Medicina a Europa. Quiero ser médico, porque quiero atender a toda mi familia, como ya atendí a mi padre, cuando lo de la hemorragia en el estómago. Entonces, yo sólo tenía trece años. (...) (Continuará)